HA CERRADO Hacía tiempo que Quintana 30 pasaba de una a otra de mis listas de restaurantes para ir a almorzar. Como está fuera del área de mi oficina tuvo que esperar hasta que vino bien quedar en esa zona . Reservé para una comida de trabajo y no me defraudó.
Es un lugar tranquilo, con diferentes zonas dentro del comedor, mesas amplias y separadas, que lo convierten en un lugar muy adecuado para almuerzos de trabajo. La decoración es elegante y discreta y transmite la imagen de un restaurante bueno de los de siempre. Al reservar pedimos una zona un poco recogida. Nos colocaron en un reservado pequeñito, muy cómodo, y nos atendieron muy bien.
El servicio es muy amable. Cuenta también con terraza donde se puede comer a la carta o de tapeo.
La cocina es de mercado y con raíces vasco-navarras. Los platos se elaboran de manera muy tradicional. Al frente de los fogones de este restaurante se encuentra uno de los socios, Miguel Ángel Muñaco, que fue jefe de cocina de Goiceko.
El día que fuimos a almorzar tomamos para compartir jamón y zamburiñas y, de segundo, uno de los comensales pidió lomito de rape, otro lasaña de zancarrón y el otro lomo bajo de buey. Yo tomé alcachofas con cardo y almendras muy ricas, la salsa es fuerte y sabrosa.
No pedimos postre, solo cafés.
Cierra domingos por la noche
Precio medio: 50 euros
– Lo mejor: La cocina es muy buena
– Lo peor: No lo encontré en mi primera visita
C/ Quintana, 30 Teléfono 915 42 65 20 Mapa de situación
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