Actualizado a 15 de diciembre de 2019
Hace unos días fui a la Mucca de Prado para celebrar una de las cenas prenavideñas de amigos. Hacía mucho que había ido a este restaurante, la última vez estuve cenando en el de Almagro. Aprovecho para actualizar el post porque, aunque lo he hecho en alguna ocasión, la verdad es que el original es de 2011.
Ayer, enero de 2011, fui a almorzar con unas amigas a La Mucca de Prado. Ya conocía el otro restaurante, el primero que abrieron en la Plaza de Carlos Cambronero, porque me había invitado a cenar en un par de ocasiones mi amiga Yolanda con motivo de su cumpleaños. Ella había encargado el menú con antelación y nos pusieron cosas ricas y variadas: pizzas, ensaladas…
Decoración
La Mucca de Prado ocupa un local de dos plantas con techos altos y grandes ventanales a dos calles. La decoración es estilo industrial vintage con paredes de ladrillo visto y suelo de damero. Los muebles son en tonos oscuros. Al final de la sala principal, subiendo un par de escalones, tienen un par de mesas que si vas en grupo, como la última vez que he ido, y te sientan ahí parece que estás en un reservado, pero viendo todo el restaurante. La primera vez que fui me causó muy buena impresión porque al llamar para reservar pedí una mesa que nos diera la posibilidad de sentarnos con un coche de bebé. Cuando llegamos nos habían reservado una mesa con espacio para el cochecito y quitaron sillas antes de que llegara Ana, mi amiga que venía con su bebé, para facilitarle el acceso. Estas cosas son muy de agradecer, la verdad.
Cocina
La cocina es tradicional y en la carta destacan las pizzas. En mis primeras visitas había probado las croquetas, la lasaña, las quesadillas y las pizzas de boletus y popeye. Todo estaba bastante bueno, pero, igual que en los otros restaurante, lo más rico es la pizza de boletus. No sé cuál será el secreto, pero está buenísima. Sospecho que esa es la especialidad de la casa, porque siempre es el plato que más gusta.
En mi última visita tomamos todo para compartir. De entrantes pedimos nachos teki, mejillones al vapor, queso fundido y ensalada de milhoja de ventresca. De segundo, pizza de boletus, como no podía ser de otra manera, y chuletón de vaca fileteado. Uno de mis amigos pidió la hamburguesa «La Mucca». A la hora del postre no nos poníamos de acuerdo y terminamos probando cuatro: Pink Panther, tarta de queso, tarta de zanahoria y spicy cocho. A mi me gustó mucho la tarta de queso, pero la mayoría votó por la de zanahoria.
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Look: sport
NO CIERRA la cocina es ininterrumpida
LA MUCCA PRECIO MEDIO: 25€.
– Lo mejor: La cocina.
– A mejorar: El servicio se despista mucho a la hora de traer las bebidas.
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C/ Del Prado, 16 Teléfono 91 420 23 49 Mapa de situación y varias direcciones más. El Grupo La Mucca Comany cuenta ya con 12 restaurantes en Madrid
Un auténtico desastre.
Un despropósito, con reserva anticipada, nos encontramos sin mesa al llegar (…)
Nos colocaron en la parte de abajo, imposible entenderse, guirigay inaguantable, por no enterarse, ni siquiera los camareros se enteran de las comandas.
Fallaron en casi todo, tardaron en servir, se olvidaron de un plato, un desastre.
Lo peor de todo, el encargado, pose chulesca, desprecio supino, le importan un carajo los clientes.
Es cierto que el sitio no es caro, pero, francamente, yo no pienso volver para que me desprecien de esta manera, prefiero gastarme el mismo dinero en cualquier otro sitio donde me traten correctamente.
Qué pena que lo hayas pasado tan mal, es un fastidio salir y sentirse tratado de esa manera. Mi experiencia, y la de mis amigos, sin embargo siempre ha sido muy buena en estos restaurantes y el servicio siempre ha sido muy amable.