El sábado pasado tenía entradas para ver La sartén por el mando en los teatros Luchana. Al salir, queríamos ir a cenar a algún restaurante de la zona y pensé que lo mejor era darme un paseo por la mañana y ver cuál me llamaba la atención. Hice fotos de varios durante mi paseo y el que más me atrajo fue Santa Rita, una braseria elegante en Chamberí.
Nos contaron que el dueño de este restaurante ha abierto otro hace dos meses, en la misma zona, también con nombre de santa: Santa Gilda.
El restaurante cuenta con una gran sala, en forma de ele, decorada de manera sencilla y elegante. Las paredes son de ladrillo visto y cuenta con grandes ventanales a la calle. La pared lateral de la la sala por donde se accede al restaurante está empapelada y debajo se ha instalado un sofá corrido. La del extremo contrario se ha cubierto con cristales de espejo. Las mesas son de madera, sin mantel, y la vajilla es muy bonita.
La cocina es de temporada, basada en el producto fresco y elaborado a la brasa. Me gustó que la mayoría de los entrantes se pueden pedir por raciones y medias raciones. Nosotros decidimos tomar todo para compartir: alcachofas confitadas y braseadas; gambones al tandoori con guacamole de mango; lomo de vaca vieja al carbón con chimichurri y, de postre, tarta de queso. Todos lo que probamos tenía el toque de sabor de las brasas.
C/ Santa Feliciana, 14 Teléfono 91 222 01 31 Mapa de situación.
