Desde que empecé a escribir este blog tengo pendiente dedicar un post a la cerveza, mi bebida favorita con diferencia. Hace unos días me invitaron a una cata de las cervezas especiales Casimiro Mahou y disfruté muchísimo, así que  ha llegado el momento de escribirlo.

Las cervezas Casimiro Mahou son las hermanas lujosas de nuestras cañas de siempre que, para los madrileños, salvo raras excepciones,  son las de Mahou.

Por si alguna vez te has preguntado el origen de la cerveza más madrileña, te cuento lo que aprendí durante la cata que pude disfrutar en el Palacio de  Santa Bárbara.

Casimiro Mahou llegó a España desde su Francia natal a principio de  1800 y  no solo fue un gran empresario, además, fue  un gran emprendedor. Fundó la compañía de cervezas Mahou y a la vez montó todas aquellas  empresas anexas necesarias para logar el triunfo de su negocio. Inventó una fábrica de hielo para poder producir  en verano y colaboró con el ferrocarril para poder distribuir su producto. Creó un gran negocio con su  mujer y sus hijos, que ahora se encuentra en manos de la  séptima generación.

D. Casimiro Mahou

Sus herederos han decidido elaborar en 2014 cuatro  cervezas especiales en honor al fundador de esta importante compañía. A cada una se la ha dado el nombre de un lugar de Madrid donde Casimiro Mahou tuvo alguno de sus negocios: Amaniel, Marcenado, Maravillas y Jacometrezo.

El diseño de la  botella está inspirado en la botella original de 1890 y las ilustraciones de las etiquetas se corresponden con ilustraciones originales. También se ha creado un vaso especial para cada una diseñado para potenciar sus diferentes sabores.

En primer lugar catamos la cerveza Amaniel. De color dorado miel- debido a la cebada caramelizada-, es de cuerpo ligero y espuma densa. Dominan en esta cerveza las notas dulces y de malta tostada. Se sirve  en vaso Pilsner, un vaso alto y fino para resaltar su carácter cristalino. Se recomienda para maridar con pescados azules, salazones y marinados, mariscos y encurtidos. Está  muy rica y resultó ser  mi favorita al finalizar la cata.

En segundo lugar tomamos la cerveza Marcenado. Al ser de trigo y contener levadura es de apariencia turbia. Contiene más espuma y algunos posos.  El olor dominante es el de  plátano maduro. El vaso de Marcenado es estrecho en la parte inferior y más ancho en la parte superior, lo que permite controlar la copiosa espuma de las cervezas de trigo y también disfrutar de sus aromas. Marida muy bien con frituras, picantes y especiados, ensaladas, escabeches y con los platos de la cocina oriental.

La tercera que catamos fue la cerveza  Maravillas, una versión más intensa de Amaniel, más densa y  amarga.  Su  apariencia es transparente y la espuma fina y persistente. Es de color miel ámbar con matices anaranjados. El olor predominante es dulce, de malta tostada y caramelo suave con toques  cítricos y herbales. Se sirve en vaso de tulipa para favorecer su  aroma y permitir una capa más gruesa de espuma. La curva hacia afuera ayuda a que sea la punta de la lengua donde primero se pueda disfrutar de la cerveza y captar el sabor dulce. Estupenda para maridar con carnes de caza menor, carnes blancas, quesos de media curación y embutidos curados.

La cuarta,  Jacometrezo, es del tipo de las cervezas de Abadía. De apariencia rojiza y transparente, su  espuma es de color beige y destellos verdosos. Domina  el color cobre intenso o ámbar rojizo oscuro. Olor con notas  de clavo y coriandro. Resulta más  intensa de cuerpo y de tránsito cremoso en boca. En su elaboración se han utilizado cuatro maltas, a diferencia de las otras que solo cuentan con tres.  Se sirve  a una temperatura más elevada, incluso la forma del vaso sniffer favorece que la vayamos calentando con las manos mientras la bebemos. Para mí es una cerveza de invierno, chimenea y manta. Marida con carnes rojas, caza mayor y quesos de curación e intensos

Estas cervezas, de producción muy cuidada, pueden adquirirse exclusivamente hasta el 16 de julio  en el Palacio de Santa Bárbara. No se pondrán a la venta hasta septiembre y solo podrán adquirirse y degustarse en sitios muy especiales.

Precio:   pack de 4 cervezas,  18 euros y con los vasos 25.

Después de adquirir estas ricas cervezas puedes tomar una cañita de Mahou de siempre en el  patio Manzana Mahou, en el propio Palacio de Santa Bárbara

Espacio Manzana Mahou: Palacio de Santa Bárbara. C/ Hortalez, 87 Teléfono 600 64 37 88  Mapa de situación