Otro de los pueblos que he descubierto este año y que me ha gustado mucho es Olmeda de las Fuentes. Lo conocí el mismo día que visité con mi amiga María Antonia  el Nuevo Baztán y como era plena siesta, de las de 40 grados a la sombra, hicimos la visita solas; no nos cruzamos con ningún ser vivo.

Me sorprendió que, desde la carretera, Olmeda de las Fuentes es como uno de los Pueblos Blancos, con las casas que da la sensación de que colgaran de la montaña.

Además de su arquitectura medieval y su bonita iglesia, me llamó la atención que este pueblo haya sido refugio de pintores desde los años 60. No tenía ni idea; de hecho, descubrí que existe una visita al pueblo siguiendo la ruta de los pintores. Os pongo aquí el  plano  y  el link a la página donde podéis ver quiénes eran y dónde vivían.