Esta semana he ido a probar el menú que ha preparado el restaurante mexicano Iztac para celebrar el Día de los Muertos. Tres platillos típicos que se toman en México los días 1 y 2 de noviembre, un país en el que se celebra la muerte como parte de la vida. Una fiesta tan relevante que desde 2008 ha sido declarada Patrimonio Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO. Los días 29, 30 y 31podrás probar la cocina de muertos en Iztac.
Menú de muertos
Este día la gastronomía juega un papel muy importante y por eso Iztac quiere celebrarlo con un menú especial. Diseñado por Juan Matías, chef ejecutivo del restaurante, consta de tres platos: Pozole rojo, una sopa prehispánica que, según cuenta la leyenda, se elaboraba con carne humana y solo la tomaban las clases altas de la tribu. Se prepara con maíz y recuerda mucho en la textura a un guiso de garbanzos.
Mukbil de pollo yucateco, mukbil significa en la cultura maya “algo que debe enterrarse” En Iztac lo hacen en una placa, pero antes se enterraba en la tierra cubierto con hojas de plátano. Es muy típico de Yucatán en el Día de Muertos y se hace con masa de maíz y un frijol especial que aquí se sustituye por frijol negro.
y el imprescindible Pan de Muerto acompañado de chocolate artesano de metate. Este pan de muerto incorpora elementos de la presencia española en México: La cruz en la forma, y toques del roscón de Reyes en la receta.
Según la creencia popular prehispánica, las almas de los seres queridos regresan durante el Día de Muertos y los vivos los reciben con su comida y bebida favorita. Iztac quiere honrar con este menú el alma de los muertos y, en especial a los amantes que dan nombre al restaurante: Iztaccíhuatl y Popocatépetl la joven pareja que murió por amor.
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