El Grupo Carbón Negro, propietario de Carbón Negro, Umo y [A] Brasa, ha abierto dos nuevos restaurantes que están dando mucho que hablar y que, nada más inaugurarse, ya se han puesto de moda, La Fonda Lironda y El Castizo de Velázquez. El ambiente es muy agradable y están llenos de gente guapa de todas las edades. El domingo almorcé en El Castizo de Velázquez, donde renace la taberna madrileña de toda la vida, y ayer conocí La Fonda Lironda, pero de ella hablaremos en otro post.
Decoración
El Castizo de Velázquez ocupa un esquinazo de Velázquez con Diego de León. Un espacio bastante grande donde antes ya ha habido otros restaurantes. Al entrar se encuentra la zona de barra y subiendo unas escaleras, la sala. En la decoración muy cuidada -recuerda a la de los restaurantes de uno de los socios, el grupo Larrumba- se ha hecho un homenaje a las taberna madrileñas de siempre. Barras de mármol, azulejos vitrificados y cristales con mensajes que recuerdan a los bares del Madrid de siempre. La sala es alegre, con ventanales y una decoración atractiva.
Cocina
La cocina es tradicional, algo que se ha vuelto a poner de moda como parece que sucede cada vez que vivimos una crisis. La carta está diseñada por los chefs del grupo, Hugo Muñoz y Mariano Barreiros y ofrece platos de la cocina española y madrileña de siempre como la gallina en pepitoria que hacen tan rica en las casas de comidas de toda la vida. Mientras mirábamos la carta nos pusieron de aperitivo salchichón ibérico con picos. Nosotros pedimos todo para compartir, que es la manera de probar más cosas y hacerte mejor una idea del restaurante. Empezamos con media ración de ensaladilla rusa con gambas y un pincho de tortilla.
Después, tomamos media ración de croquetas de jamón ibérico y torreznos de Alalpardo.
De postre tarta de queso. Es la misma en todos los restaurantes del Grupo Carbón Negro, de 1o.
El servicio es muy atento y sirven rápido y bien.
C/ Velázquez, 97 Teléfono 91 108 88 08 Mapa de situación.