El restaurante Sargo abrió sus puertas hace dos años con el sobrenombre de “el arrecife de Madrid”. Estaba en plena efervescencia de mi aisakis y no pude ir a conocerlo. A la vuelta de verano fui a cenar y me gustó mucho.
El restaurante ocupa un espacio bastante grande en dos alturas. Cuenta con una zona de barra, donde predominan las plantas, el color amarillo y los estampados y en la que se ha dispuesto unas cuantas mesas altas con taburetes. A continuación se encuentran las dos salas, decoradas de diferentes maneras. En una se han empleado tonos azules y estampados y en la otra, los tonos ocres y se han puesto muchas plantas. Destacan los retratos en colores fuertes de dos personajes tan conocidos como Pablo Picasso o Steve Jobs, que dan nombre a las salas. También disponen de terraza, semiexterior lo que la hace agradable durante bastantes meses.
La cocina es vanguardista y mediterránea con influencia gallega y toque viajeros, basada en la calidad de la materia prima. La carta está diseñada por Pucho Landín, que es demás el director del equipo de cocina. Este chef gallego ha trabajado en restaurantes de prestigio como Diverxo, donde ha aprendido técnicas de la cocina asiática que utiliza para algunos de sus platos tradicionales y los hacen diferente, pero respetando su esencia. Nosotros fuimos a cenar a finales de agosto una noche de tormenta, así que cenamos dentro. Pedimos como entrante alcachofas y unas patatas bravas, muy originales que nos encantaron.
De segundo tomamos tartar de salmón con aguacate y mejillones de lata que los sirven muy atractivos y la ración es muy grande. No pedimos postre concienciadas con la operación post vacaciones.
Sargo C/ General Días Porlier, 57 Teléfono 91 010 66 57 Mapa de situación. Cocina de mercado. (Precio medio 50€)