La Entreplanta se ha reformado en octubre de 2017, pensaba actualizar este post, pero merece la pena dedicarle uno nuevo, lo tienes pinchando aquí.
La Entreplanta se ha convertido en otro de mis sitios de cabecera. Este nuevo restaurante se ha instalado en un local, junto a la Gabinoteca, por el que han pasado diferentes proyectos, la mayoría con éxito. Desde que se inauguró voy con mucha frecuencia y ya tocaba hacer el post.
Desde la terraza, instalada en la zona peatonal alrededor del parque, se accede a la zona de barra. Dispone de dos plantas más donde se encuentran los comedores. La decoración es una mezcla de objetos de diferentes estilos. Unas paredes son blancas con zonas de piedra y otras lisas vestidas con cuadros con mucho color. En la plata de arriba, las mesas y las sillas son negras, sencillas y en la de abajo, aunque las mesas son iguales, las sillas son blancas, así como unos bancos corridos que se encuentran pegados a las paredes. Una gran lámpara, hecha a base de bombillas que cuelgan de cables de diferentes colores, preside la zona de barra.
La cocina es mediterránea, de mercado. He cenado varias veces y picado algo en su terraza muchas más. Todo lo que he probado está muy rico, desde las patatas tres salsas a la ensalada de tomate con ventresca, pasando por las lágrimas y los chupa chups de pollo o la tortilla de patata. De postre solo he tomado la tarta de queso.
El servicio es muy amable. A veces he ido tarde al salir de un espectáculo y, aunque falte poco para cerrar, siempre me han atendido con amabilidad sin hacer mención a la hora. Se agradecen mucho esos detalles. El ambiente es bastante bueno y tranquilo.
C/ Fernández de la Hoz, 55-57 Teléfono 91 412 06 30 Mapa de situación
Decoración y sitio muy bonito y agradable.Todo de demás supercutre.
En la cena del sabado nos ponen, piso de arriba unas servilletas blancas de papel, como unos kleenex. Vergonzoso. SE lo digo al camarero y me dice que no tiene otras.
Pedimos salmón ahumado y aguacate en una especie de steak tartara pero el cocinero no debe tener ni idea y le echa aceite por fuera. Resultado una cosa asquerosa bańada en aceite y muy grasienta.
El pan de ese cutre de barra. Sin comeentarios.
Pedimos cachopo y malísimo igualmente.
Para el postre no hay algunas cosas de la carta.
Opinión resumen> sitio muy bonito por fuera pero fatal llevado y con la comida de pena.
Hola Luidia, gracias por comentarlo. La última vez que fui habían cambiado los camareros a bastante peor, aunque la cocina seguía siendo rica. No he vuelto, pero me acercaré en cuanto pueda para actualizar el post y reflejarlo. Un saludo