Los fines de semana, como sabéis, me encanta pasear por diferentes barrios de Madrid. Mi último recorrido ha sido por la zona de la calle Santa Isabel, cerca del museo Reina Sofía y el barrio de Lavapiés. Reservamos para comer en La Burlona, un bar con excelente cocina y un servicio muy amable que nos sorprendió.
Decoración
Desde la calle ya llaman la atención la puerta, las contraventanas de madera y los grandes ventanales. Al entrar se accede directamente a la sala, un espacio con dos grandes columnas, donde se encuentra la barra y alrededor las mesas. Estas son de mármol blanco, no hay manteles y destaca la vajilla de duralex ámbar años sesenta. Bajando unas escaleras se encuentra la típica cava de las casas del Madrid antiguo, un espacio muy acogedor con mesas bajas para tomar una copa. Cuenta, además, con una terraza de acera.
Cocina
La cocina es de fusión y la carta es muy atractiva; de hecho, nos costó trabajo decidir qué pedir. Tomamos Banh mi de presa ibérica al carbón en brioche, delicioso y original.
Shao mai de picadillo de matanza con cabrales y huevo de codorniz.
Nos ofrecieron fuera de carta canelones de pato y rabo de toro con foie y los pedimos de segundo, nos pareció todo delicioso. De postre tarta de queso Idiazábal con toque de azul y helado de turrón, rica y contundente, de las que mi hermana marida con vino tinto.
El servicio es muy amable. Un restaurante muy recomendable.
C/ de Santa Isabel, 40 Teléfono 91 018 00 18 Mapa de situación.