Hace apenas un mes abrió sus puertas Bugao Madrid, el restaurante que todos querrán conocer. Se trata del nuevo proyecto del chef Hugo Ruiz, con una larga trayectoria profesional en restaurantes de prestigio, y que cuenta con un Sol Repsol en su restaurantes de Ceuta. Fui a cenar en cuanto volví de vacaciones y me gustó mucho.
Decoración
El restaurante ocupa el local donde estuvo durante años el Café Saigon y, después, Pomerania. Cuenta con dos plantas y terraza y cada uno de los espacios responde a los conceptos de restaurante que el chef tiene en Ceuta. En la primera planta está el restaurante Gourmet que se correspondería con su restaurante Bugao y la planta baja y la terraza con Piscolabis un gastrobar donde ofrece una cocina más informal. La decoración la ha llevado a cabo la arquitecta de interiores Silvia Picar, quien se ha inspirado en los pueblos del Mediterráneo y su vínculo con el mundo árabe, lo que deja ver a través de diferentes elementos ornamentales. Sobre las mesas hay detalles diseñados especialmente para el restaurante que llaman la atención, como los bajo platos de la zona gourmet que son atunes que terminan en las olas del mar o la carta digital de la planta baja que es un pez. La cocina, que, está también en la planta baja es bastante grande y está abierta a los comensales.
La zona gourmet no estaba todavía abierta, aunque nos la enseñaron, porque falta ultimar algunos detalles, muy pocos, así que es posible que nada más publicar este post tenga que quitar esta información.
Cocina
La cocina de Diego Ruiz es “cocina entre mares” basada en los pescados de Estrecho y la cocina de mercado, jugando con la estacionalidad del producto. Cada uno de los espacios del restaurante cuenta con su propia carta, pero en los dos los productos estrella del chef son el atún y el cerdo; de hecho Bugao quiere convertirse en el nuevo templo del atún de Madrid. En la planta gourmet se servirá alta cocina y se incluirán los platos de mayor éxito en el restaurante de Ceuta.
En la planta baja y la terraza, la zona gastrobar, se sirven montaditos, tapas y otros platos muy ricos y originales. Nosotros cenamos en la terraza y esto fue lo que tomamos: tacos de costilla ibérica de bellota confitada, yakiniku, maíz crujiente y manzana verde, deliciosos; tortilla de patata melosa, jugo de ibérico y soja.
Rrebaná de solomillo de atún rojo confitado en manteca colorá.
Croquetón de jamón ibérico de bellota con su papada curada; berenjena asada con miso, sésamo y aceite ahumado, lo que menos me gustó porque estaba poco hecha y un poco dura.
De postre tomamos arroz con leche fresca asturiana, caramelo crujiente y vainilla y coulant fluido de chocolate blanco, frambuesas, frutos rojos helados.
El servicio es muy amable, aunque en algunas cosas falta un poco de rodaje. Muy buena la relación calidad precio, espacio.
C/ María de Molina, 4 Teléfono 91 576 35 04 Mapa de situación.
Así es Bugao Madrid, el restaurante que todos querrán conocer
