Actualizado el 7 de julio de 2021. El lunes me invitaron a cenar mi sobrina y su amiga Claudia en Ovillo y he aprovechado para actualizar el post. Había ido el año pasado que me invitó a cenar mi amigo Alfredo, fundador de la web Los 5 Mejores. Eligió el restaurante Ovillo, el proyecto más personal de Javier Muñoz Calero. Estuvimos hablando un rato con Javier y nos contó que, tras haber llevado a cabo muy diferentes iniciativas, todas con éxito, “un día, mientras iba de uno a otro de mis proyectos me di cuenta de que formaba parte de todos y al mismo tiempo de ninguno. Me quité el casco, tomé aire, me volví a casa y decidí dar un cambio de rumbo”. En Ovillo ha vuelto a sus raíces de cocina más clásica.
Me encantó la vena solidaria del chef. En Ovillo, la mayoría de los camareros vienen del proyecto Cocina Conciencia de la Fundación Raíces. En esta fundación se forma a jóvenes españoles y extranjeros que no tienen un referente adulto en España para que puedan trabajar en restauración. Algunos de los camareros que trabajan hoy en Ovillo llevan con Javier desde hace años, y otros están teniendo su primera experiencia profesional en este restaurante.
Javier Muñoz-Calero
Decoración
Ovillo se encuentra en una nave de la calle Pantoja de las que no hace muchos años se utilizaban para rodar anuncios publicitarios. El espacio es, por tanto, grande y diáfano, y se ha decorado de manera alegre y elegante. También cuentan con zona de barra donde se puede tomar el aperitivo. La sala principal está llena de plantas y las mesas son redondas con manteles blancos. A continuación está la cocina, completamente vista, y enfrente se ha instalado una mesa alta con taburetes, más informal que el resto del restaurante. Por último, cuenta con un patio-jardín muy pequeñito, situado al fondo de las salas, con una mesa en un rincón a modo de reservado que me encantó.
Cocina
El chef nos ofrece en este restaurante una cocina clásica e internacional. En los platos se pueden apreciar sus influencias de la cocina francesa y suiza, países donde se formó, y de la cocina española, sobre todo vasca y catalana, así como murciana, una región a la que se siente muy vinculado. También se nota la etapa de Muñoz Calero en Tailandia. Vivió allí durante algún tiempo y aprendió y disfrutó mucho a juzgar por cómo habla de su experiencia. En Ovillo, donde ofrece una carta bastante corta, sus platos son clásicos, sencillos, muy sabrosos y bien elaborados. En la carta se incluyen recetas de caza y guisos.
A la hora de pedir nos dejamos aconsejar para evitar el pescado. Nos pusieron de aperitivo rillete de conejo con totopos, muy rico. Nosotros pedimos todo para compartir -lo sirven directamente repartido, algo muy de agradecer en estos tiempos. Como entrante tomamos alcachofas al carbón, las ponen por unidades. Después tomamos un espectacular panaché de verduras con yema de huevo sobre un puré de guisantes. Las verduras, al dente, conservan todo su sabor.
Después tomamos carrillera, que sorprende por su sabor y su textura. Para terminar, de postre pedimos las tartas de queso y
de manzana, a cuál más rica.
n la última visita pedimos cosas diferentes, excepto el panaché que quería que lo probaran porque me parece de los mejores platos. Tomamos, además, como entrante, vieira gratinada y piquillos y morrillo.
De segundo pedimos chipirón, corzo y carrilleras, todo muy rico. De postre tartaleta de limón.
Algunos de sus clientes van dos o tres veces a la semana y esto lo tienen en cuenta a la hora de elaborar la carta para que puedan comer variado y sano.
Dentro de unos días he quedado con Javier para hacerle una entrevista para que conozcamos mejor a este gran chef.
C/ Pantoja, 8 Teléfono 91 737 33 90 Mapa de situación.