Uno de mis descubrimientos de esta semana ha sido Sottosopra, el restaurante romano de Madrid. Situado en el callejón de Puigcerdá, una de las calles más atractivas en cuanto a gastronomía se refiere, ocupa el lugar donde estaba No Restaurante.
El restaurante pertenece a la familia Fedeli, que cuenta con varios restaurantes en Roma. El primero fue inaugurado hace más de 50 años por Romeo Fedeli y sus nietas han comenzado su expansión fuera de Roma en 2018 y Madrid ha sido el lugar elegido.
El nombre Sottosopra, aunque llama la atención en español -significa patas arriba-, define la cocina de este restaurante que busca experimentar y crear nuevas fórmulas en sus platos.
Inaugurado el pasado mes de noviembre, está situado en una casa de tres plantas y tiene una distribución muy atractiva. Cuenta con una sala principal en la primera planta, una planta superior con vistas a la principal, con rincones muy atractivos; un privado en la bodega para seis personas y una terraza en la calle. La decoración es diferente en cada sala y el comedor principal transmite la sensación de estar siempre en primavera.
La cocina es romana, con recetas innovadoras, pero respetando siempre la materia prima disponible en temporada. Se elaboran a partir de la base tradicional y se añaden toques diferentes para sorprender.
Uno de los platos más típicos de este restaurante son las rosettas, pan típico romano relleno de diferentes ingredientes, tanto dulces como salados- para nosotros sería minibocadillos o montaditos- Las probamos sin nada en la cesta de panes y, en el postre, rellenas de nutella. Fui con mi hijo y empezamos la cena brindando con prosecco Foss Marai. Como entrantes tomamos cestita de pasta quebrada rellena de paté de hígado, huevo de gallina de granja y trufa; el más original de lo que probamos y nos encantó, y rollitos crujientes de bacalao mantecados con crema de patata a la leche fresca.
A continuación tomamos pasta: mi hijo, spaghetti tradicionales de Roma a la carbonara acompañados de guanciale y queso pecorino, deliciosos, y yo tomé unos spaghetti, fuera de carta, con gambas y pistacho, que todavía nos gustaron más. De postre nos pusieron una degustación de algunos de la carta: rosetta con nutella, tiramisu y buñuelos de nata, además de un bizcocho, fuera de carta, tipo brownie, todos muy ricos.
Como mañana es San Valentín y Sottosopra tiene rincones muy románticos, es muy recomendable para una cena en pareja. Han elaborado un menú especial con varios platos a elegir que incluye sus famosas rosettas.
C/ Callejón de Puigcerdá, 8 Teléfono 91 748 61 97 Mapa de situación.