¡Cómo me gusta ir a comer a restaurantes de los que nunca he odio hablar y, comer genial! Hace unos días, después de una reunión de trabajo muy interesante, el organizador había reservado en La Parrilla de Juan para ir a comer el menú del día y vaya con La Parrilla de Juan, menudo descubrimiento.
El restaurante, bastante grande, está decorado a medio camino entre un mesón y una casa de comidas. Al comedor se accede por la zona de barra. Las paredes combinan partes blancas con otras de ladrillo visto y las mesas, cuadradas, están vestidas con manteles blancos y las sillas son de madera oscura. Aunque había mucha gente y nosotros éramos un grupo grande, no había mucho ruido.
La cocina es española tradicional. Nosotros, como he explicado, fuimos a tomar el menú del día, que incluye varios platos a elegir. Yo tomé de primero unos judiones especulares y de segundo, pisto con huevos y pan frito. Si, sé que es muchísimo comer, pero estaba rodeada de señores que comen. Mis compañeros tomaron, de entrante, ensaladilla rusa, croquetas de jamón, croquetas de gamba y, algunos se apuntaron a los judiones y el pisto. De segundo, la mayoría se decidió por el bacalao y coincidieron en que estaba riquísimo. Otros tomaron solomillo de cerdo. De postre probamos las tartas de queso y chocolate y un milhojas de crema, el último que quedaba, que pasa a mi lista de postres favoritos.
C/ Santa Hortensia, 62. Teléfono 91 416 76 53 Mapa de situación