Actualizado el 10 de enero de 2018
María Marté deja el restaurante para llevar a cabo un proyecto solidario en su país, la República Dominicana, de formación de mujeres jóvenes sin recursos como cocineras. En el Club Allard la sustituye José Carlos Fuentes, que ha trabajado Sant Pau de Sant Pol de Mar (Barcelona) que cuenta con tres estrellas Michelín. Además, ha ejercido como jefe de cocina del Palacete La Seda de Santa Cruz (Murcia), donde en 2010 consiguió el título de Cocinero del Año y en Tierra y en Torrico (Toledo), donde logró una estrella Michelin.
Desde hace unos años, cuando tengo que celebrar algo importante de mi familia regalo una cena en un restaurante con estrellas Michelín. Este año se ha graduado mi hijo, elegimos el Club Allard y nos encantó. Cuando estaba empezando a escribir el post me enteré de que Maria Marté y Luisa Orlando -chef y directora respectivamente de este restaurante- recibían este año el premio Eckart, uno de los más prestigiosos del mundo gastronómico, en la categoría de innovación. Desde aquí mi felicitación.
Tenía ganas de conocer este restaurante porque soy una gran admiradora de María Marté, su chef. No la conozco personalmente, pero me encantan las mujeres que han conquistado posiciones profesionales con un gran esfuerzo. En este caso María emigró a España de Santo Domingo y empezó fregando platos en el Club Allard. Su padre tiene un restaurante en su tierra natal y eso debió notarse cuando empezó a colaborar en la cocina. Fue creciendo en su carrera junto a Diego Guerrero- actualmente propietario del restaurante DSTAgE– hasta llegar a la posición en la que está.
Los chicos eligieron el menú largo y yo, que no puedo tomar pescado y que como siga así acabo vegetariana, el corto. En realidad me hicieron un menú especial delicioso, en el que algunos platos coincidían con el elegido por mis niños. Tomaron de aperitivo arepa de placton y caviar de Riofrío y yo, cuchara de mostaza con tartar de buey. Para empezar les pusieron anguila ahumada con rocoto y coco blanco; a continuación tomaron bombón de carabinero y a mi me pusieron ravioli de guisantes con papada ibérica. Continuamos con un chupito, ellos de pez mantequilla y espárrago blanco y yo, solo de espárrago. Después todos tomamos un cupcake de huevo de codorniz y trufa, menos mal que este plato lo puede tomar porque estaba espectacular. El menú de los chicos continuó con carrillera de rape cremoso de lima kaffir; cigalas confitadas con ajomarino y, a continuación, arroz del mar seguido de lomo de atún con cítricos y nubes de amontillado. Mientras tanto yo tomé ciervo colorado con tierra chen-chen. Los dos platos siguientes y el postre fueron lo mismo para todos. Tomamos asado negro y pichón de Bresse con risoto de yautia blanca y bija. De postre nos pusieron flor de ibiscus con pisco sour, quesos dos texturas con membrillo de guayaba; cremoso de chocolate y, por último, dulce tentación. Acompañamos todo con vino blanco.
El Club Allard C/ Ferraz, 2 Teléfono 91 559 09 39 Mapa de situación.
