Si hay un sitio que me ha seducido por completo este año es el hotel Palacio de los Duques. Lo conocí cenado en Dos Cielos, uno de sus restaurantes; volví a la fiesta de unos amigos y, como no hay dos sin tres, fui a cenar para celebrar mi cumpleaños. En esta última ocasión elegí Montmartre y también me encantó.
Montmartre 1889 está decorado en tonos rojos, negros y dorados y los cuadros son un homenaje a la Exposición Universal de París. Resulta elegante, espacioso y confortable. A lo largo de una de las paredes se extiende un sofá de estilo capitoné en marrón, mesas cuadradas y sillones en rojo. Nosotros cenamos en el patio que es, junto a la terraza de la azotea, mi lugar favorito de este hotel.
La cocina de este restaurante vinoteca combina platos españoles y franceses y en carta no es muy larga. Al llegar nos ofrecieron de aperitivo champagne y frutos secos. Para cenar pedimos, para compartir, croquetas líquidas y ceviche de mango y bogavante. Como plato principal cada uno elegimos uno diferente, yo tomé raviolis frescos de trufa y setas de temporada, delciosos, siguiendo los consejos de César. Mis chicos pidieron Jarrete de Ternera confitado con salsa de vino tinto, mini verduras y patatas soufflees y steak Tartare con helado de mostaza y encurtidos. De postre eligieron “La Luna de Montmartre” un postre relleno de vainilla y yuzu, muy original, y coulant de chocolate con helado casero. Nos encantó todo lo que tomamos, muy bien servido y los camareros muy amables. En este restaurante también se da mucha importancia a la carta de vinos.
Este hotel y sobre todo su patio se ha convertido en mi rincón favorito de Madrid este año.
C/ Cuesta de Santo Domingo, 5 Teléfono 91 541 67 00 Mapa de situación