HA CERRADO Un amigo me descubrió unos días antes de Navidad el restaurante venezolano Antojos Araguaney Grill. Fuimos a cenar y me pareció tan rica la carne, que  he vuelto con otros amigos esta semana.

El restaurante cuenta con una barra, situada nada más entrar, un primer comedor con unas pocas mesas, que fue donde cenamos, y otro comedor un poco más grande, independiente, donde almorcé en mi segunda visita. La decoración es muy sencilla. Las  paredes son blancas con algunas zonas de ladrillo visto y las  mesas de madera muy sencillas, con manteles de papel.

En verano cuentan con terraza

El servicio es muy amable, atento al estilo de los países iberoamericanos. El primer día que fui a cenar estuve charlando durante un buen rato con uno de los dueños del restaurante.  Comentamos que, a veces, les han puesto de manifiesto que en España nos parece un poco excesiva la interacción que mantienen los camareros con los clientes, pero que, aun así, ellos quieren que el restaurante se mantenga en todo al más puro estilo venezolano.

En cuanto a la cocina, los entrantes son típicos venezolanos pero el plato fuerte es la carne, que probablemente sea una de las mejores de Madrid: Angus traído de Irlanda y servido en su punto. ¡Excelente!

En mi primera visita, cenamos arepitas con nata y tequeños de queso, los dos platos para compartir, y de segundo carne.  Mi amigo tomó centro de lomo y yo lomito, que es solomillo pero cortado como un filete largo y más fino. Acompañamos el segundo con yuca frita. Ya sabéis que no puedo tomar vino tinto, así que regamos la cena con un Rueda blanco.

Para el almuerzo, como éramos tres, decidimos probar la punta de trasera, la carne estrella de la casa,  que la ponen en la carta con el precio por kilo. Preguntamos, y nos dijeron que eran unos 300 gramos por comensal, un poco grande la ración, pensé, pero como mis acompañantes eran señores, sabía que me ayudarían. La sorpresa fue al servírnosla. Una vez que habíamos terminado, y habíamos comido bien, nos anunciaron que nos quedaba una segunda fuente de carne. En la cuenta vi que sirvieron medio kilo por persona y resulta una cantidad excesiva. De primero habíamos tomado ensalada Patanemo, que tiene lechugas variadas, tronquitos de brasil y aguacate y está muy rica, y arepitas con un queso parecido a la Torta del Casar, más pequeño y un poco más suave.

Cierra domingos noche y lunes todo el día

Precio medio: 40 euros

Lo mejor: la carne es excelente

Lo peor:  excesiva la ración de punta de trasera

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