Siempre me ha gustado mucho El Cacique, pero desde que fui con mi amiga Rus y nos recibieron con una botella de Moët & Chandon helada estoy abonada. Pinchando aquí lleva a un nuevo post.

El Cacique cumple  ahora 40 años, y me ha parecido el mejor momento para dedicarles un post. A mí me encanta este restaurante, y cuando hace buen tiempo y tengo algún almuerzo de trabajo comer en  la terraza es lo que más me gusta.

El Cacique abrió sus puertas en 1973 haciéndose un hueco en el panorama gastronómico madrileño. Basaron su éxito en la utilización de productos argentinos de calidad y platos de la  cocina mediterránea.  Actualmente, los propietarios cuentan, además, con otros tres restaurantes,  La Lumbre del Cacique y dos Barras del Cacique, una en Madrid y otra en La Moraleja. Se han convertido en restaurantes de referencia por su calidad y la amabilidad del servicio.

El restaurante cuenta con dos plantas cuyos  muros están pintados de color tierra y con los techos cubiertos de  cuero añejo. En las paredes cuelgan retratos de  indios originarios de América del Sur. Dispone, además, de una terraza sobre la acera acondicionada para invierno, que cuando hace buen tiempo está siempre animada.

En cuanto a la cocina, la carta es muy rica y amplia: se puede tomar pasta, carne, pescados…  Destacan platos españoles y argentinos como la picada o las empanadas de carne  criolla. Cuando voy, normalmente tomo carne con alguna de sus variadas ensaladas y, por supuesto, acompañada con unas patatitas 🙂 La última vez que fui a almorzar comimos diferente: tempura de verduras, carpaccio y hamburguesa criolla, no nos cupo el postre.

Cierra domingos noche

Precio medio: 50 euros

– Lo mejor: se come muy bien

– Lo peor: por ahora no lo he descubierto

C/ Padre Damián, 47. Teléfono 91 359 26 26 Mapa de situación 

¡Felicidades a todo el equipo de El Cacique, no es fácil mantenerse 40 años!