Actualizado. (Post original de 14 de mayo de 2014)  Hace ya años que escribí este post y, desde entonces no faltan las rosquillas de San Isidro en casa. Casa año descubro pastelerías donde van elaborando nuevas variedades que se suman a las cuatro clásicas. Este año, por ejemplo, El Riojano ha preparado unas de chocolate en honor al primer Año Santo de nuestro Patrón. También he visto, pero no he probado unas de naranja en otra pastelería. En este post os cuento cómo se hacen y dónde se compran las rosquillas de San Isidro.

Un día, paseando con mi sobrina vimos el escaparate de una confitería en el que había por lo menos 4 ó 5 variedades distintas de rosquillas e intenté explicarle cuál era cada una de ellas. Como no podía ser de otra manera, me miró perpleja porque dice que jamás le había hablado de este típico dulce. Esto me hizo escribir el post y al día siguiente las llevé a casa para merendar.

El origen

Parece ser que el origen de las rosquillas se remonta a la época de los romanos. Desde entonces se fueron incorporando como plato imprescindible en cualquier fiesta popular, y muchos comerciantes instalaban en la calle su puesto de rosquillas y las vendían ensartadas en un hilo bramante. Si las crónicas que leo sobre nuestras tradiciones no me engañan, en el siglo pasado se hicieron muy famosas las de la Tía Javiera, que las popularizó en las fiestas de San isidro.

Las rosquillas del Santo son fundamentalmente de cuatro clases: tontas, listas, de Santa Clara y francesas. Las cuatro se elaboran a partir de la misma base, es el acabado lo que diferencia a unas de otras. Actualmente se elaboran al horno en lugar de fritas, lo que ha reducido bastante su valor calórico.

Receta

Ingredientes

• 250 g de harina de trigo
• 8 g de levadura en polvo
• 3 huevos
• 6 cucharadas soperas de aceite de oliva virgen extra
• 75 gramos de azúcar
• 25 gramos de anís dulce
• 3 g de sal y 3 de anises

Elaboración

Ponemos dos de los 3 huevos (el tercero se reserva para pincelar las rosquillas), el azúcar, la sal, el aceite y el licor de anís en un cuenco grande y batimos todo durante unos 10 minutos.

Pulimos la harina y la levadura pasándolas por un tamiz y las añadimos a la mezcla. La agregamos a la mezcla anterior, junto con el anís en grano, y mezclamos hasta obtener una masa homogénea y blandita. Podemos rectificar si no está en su punto añadiendo poco a poco a harina.

Hacemos bolitas del tamaño de una nuez y les hacemos un agujero en el centro y las cubrimos con huevo con un pincel. Las ponemos en una bandeja de horno cubiertas de papel vegetal durante 10 minutos. Al sacarlas las dejamos enfriar antes de servir.

Las tontas son las de arriba

Las rosquillas tontas son las más simples y a veces pueden resultar un poco secas. Las listas van bañadas en azúcar fondant (elaborado con sirope de azúcar, zumo de limón y huevo batido) y al terminarlas quedan en color amarillo, aunque actualmente se terminan en diferentes colores. Las de Santa Clara están recubiertas de un merengue seco y, normalmente, son blancas y las francesas se acaban con un rebozado de granillo de almendra.

De izquierda a derecha: tontas, listas, francesas y de Santa Clara

¿Cuáles son tus favoritas? ¿En qué pastelería las compras?

A mi me encantan las de El Riojano, creo que es de las mejores pastelerías donde se pueden comprar los dulces típicos, pero es cierto que en Madrid las preparan bien en muchas pastelerías que están en mi listado las mejores pastelerías de Madrid y también en el de los mejores sitios para merendar en Madrid. 

Dónde comprarlas

Estas  son las que he probado nuevas que me han gustado mucho:

Chocoplanet C/Pablo Sánchez, 4 Teléfono 658 37 45 63 Mapa de situación. Las primeras que hemos tomado este año y nos encantaron. También hemos probado, y todavía no ha llegado el día de San Isidro, las de El Panazo C/ Ferrer del Rio Mapa de situación y otra dirección más, y Las de La Hermosita C/ Espronceda, 28 Teléfono 91 421 32 58 Mapa de situación. Tanto en una como en otra pastelería han incorporado nuevos sabores.

En comentarios tenéis recomendaciones de lectores que he probado y son deliciosas.